Hidrata, sublima, protege
Permanente
Ilumina - Protege - Hidrata
Una crema facial no grasa al Tamanu BIO y Monoï que protege la piel de los efectos del sol, a la vez que sublima la tez.
Inspirada en los rituales de cuidado de la piel de la Polinesia, la crema solar facial extrae sus beneficios de 2 activos naturales: El monoï y el tamanu BIO. Con filtros solares que protegen de los rayos UV y previenen el fotoenvejecimiento cutáneo, la piel queda protegida y realzada con pigmentos iluminadores. La piel queda protegida y sublimada gracias a los pigmentos iluminadores. La crema solar sublime para rostro es adecuada para todo tipo de pieles. Disponible en SPF 30 y SPF 50+.
Su textura cremosa y ligera no deja sensación de pesadez ni marcas blancas. La fórmula no grasa y no comedogénica se adapta perfectamente al uso en el rostro y deja un agradable aroma a flores de tiaré.
- Protege eficazmente el rostro de los rayos UVB y UVA.
- Hidrata: con los beneficios reparadores de 2 activos naturales de la Polinesia, el Tamanu BIO y el Monoï, esta crema hidrata la piel a la vez que previene el fotoenvejecimiento.
- Sublima: su fórmula no grasa realza el cutis y deja la piel radiante*, sin dejar marcas blancas. El Aceite solar seco es adecuado para todo tipo de pieles.
*El 96% está de acuerdo en que la piel queda radiante, testado en 90 personas después de 14 días de uso.
Aplicar una cantidad generosa antes de la exposición al sol (una dosis abundante por todo el rostro)*. Volver a aplicar con frecuencia para garantizar la protección de la piel, especialmente después de nadar, secarse con toalla o sudar. No permanecer demasiado tiempo al sol, aunque se utilice un producto de protección solar. La sobreexposición al sol es peligrosa. Evitar la exposición al sol entre las 11:00 y las 16:00. Alejar a los bebés y a los niños pequeños de la luz solar directa. Llevar ropa protectora (por ejemplo, sombrero, gafas de sol, camiseta).
*Si se reduce la cantidad aplicada, disminuye el nivel de protección.
El tamanu es conocido como el oro verde del Pacífico y es reconocido en la Polinesia por sus propiedades protectoras y regeneradoras desde hace siglos. Se utiliza para tratar quemaduras, afecciones cutáneas y para proteger y realzar los tatuajes tradicionales. Nuestro monoï de Tahití con denominación de origen es la sutil unión de dos plantas de la costa de la Polinesia. Se obtiene empapando 12 capullos frescos de tiaré (Gardenia Tahitensis DC), recogidos al amanecer, en aceite de copra refinado de la especie Cocos nucifera.
97 % esistente al agua¹
97% piel protegida e hidratada ¹
96 % tez sublimada¹
90 % piel sublimada y efecto buena cara¹
¹Prueba de consumidores con 90 personas después de 14 días de uso.
